
Consejos de seguridad en el manejo del caballo
Si estas aprendiendo a montar a caballo o simplemente disfruta observándolo desde una posición cercana,es necesario tomar precauciones para su seguridad, debe prevenirse de posibles accidentes o lesiones. Estas recomendaciones pueden ayudarle a no recibir patadas, dedos pisoteados, o ser arrastrado.
Como animales de presa, la capacidad de un caballo para reaccionar rápidamente y salir huyendo de un depredador fue clave para su supervivencia en el medio salvaje, este instinto se mantiene fuertemente en los caballos actuales domésticos.
Mantenga la calma y la tranquilidad, los movimientos bruscos pueden hacer que el caballo dé patadas o salte hacia los lados.
Nunca te pares directamente detrás de un caballo.
Para limpiar los cascos de un caballo o poner un vendaje, no te pongas ni en cuclillas ni de rodillas, párate e inclínate hacia delante de modo que si el caballo se mueve puedas salir de su camino rápidamente.
Nunca lleves las riendas alrededor de ninguna parte de tu cuerpo, si el caballo comienza a andar, puede ser arrastrado.
No metas los dedos dentro de los cubos de alimentación mientras comen, los caballos se vuelven muy golosos y rápidamente pueden confundir un dedo con una zanahoria.
Usa zapatos resistentes o botas que le protejan los pies en caso de que su caballo camine por encima de ellos, no te pongas zapatos finos ni sandalias.
Al atar un nudo utiliza un broche de presión de liberación rápida por si el caballo se asusta pueda ser liberado rápidamente. La sensación de estar constreñido puede causarle pánico hasta el punto de hacerse daño a sí mismo o a ti.
El lugar más seguro para estar de pie está al lado de los hombros del caballo donde puedan verse mutuamente, o a 10 o más pies de distancia.
Cuando esté preparándose para ensillar a al caballo o limpiar el establo, amárrelo. Un caballo suelto en un granero puede causar estragos.
Al pasar por una puerta, asegúrate de que la puerta quede abierta para que el caballo no se golpee con ella, esto puede asustarlo y provocar que lo arrastre o lo pisotee.